Estimado Profesor y Compañeros

Durante el desarrollo de este curso, pudimos detectar que uno de los mayores flagelos que afecta nuestra sociedad es la corrupción. La vemos en reflejada en todos los ámbitos de nuestra vida, y no podemos decir que es una acción específica de determinado grupo social, raza o religión,  al contrario todos estamos de uno u otra formas salpicados de ella o fuimos sujetos activos en ella.

Problemas como estos:

No podemos olvidar que la corrupción es el producto de una sociedad decadente, falta de valores y moral,  ya es  pan de cada día ver en los noticieros casos de corrupción constante y se nos hace cotidiano pero que podemos hacer para que no dejemos este legado a nuestros hijos.

Como primera medida devolver a la educación una materia que fue suprimida Ética y Valores para que el niño y joven reconozca las líneas que rigen nuestra conducta.

La Educación ciudadana, un proceso que parta de lo individual al colectivo, por medio del  ejemplo individual positivo,  fomentar en cada ciudadano la reconstrucción ética de nuestra sociedad.  

 Importante fortalecer las leyes que castiguen a quienes incurran en la corrupción, actualmente nuestras  leyes son muy débiles y fáciles de burlar.  "Si se tratara de proponer un mecanismo de prevención por la vía legislativa propondría que la corrupción fuera tipificada como un delito atroz de lesa humanidad. Porque la corrupción es el más disolvente de todos los peligros que enfrenta la sociedad colombiana en nuestros tiempos. Es más explosiva que el terrorismo, causa más inestabilidad que las perturbaciones de orden público, asusta más que la inseguridad urbana, es más criminal que el secuestro, genera más pobreza que la crisis agrícola y que la ignorancia. La corrupción es más inquietante que todos esos fenómenos, porque entre otras cosas, los genera. Es la causa primera de todos esos efectos. Una vez asumida la corrupción con esa característica delictiva, propondría su castigo a través de la muerte". Juan Gossain

Pero voy a tocar como propuesta la Educación desde los colegios como una forma de trabajar en la renovación de la moral de la sociedad y el fomento de la ética y valores en niños y jóvenes para que los valores sean incorporados como mapa de ruta para su comportamiento diario.

Para lograrlo es importante incluir en el currículo educativo desde primaria  la ética y los valores  hasta que el joven finalice su educación.   Que a medida que avanza en  contenidos conceptuales, procedimentales y actitudinales  se evidencie  su capacidad de interpretar y analizar los problemas sociales, reconociéndose como sujeto activo y responsable ética, moral y socialmente.  Todo esto permitirá crear nuevos modelos de pensamientos, nuevas normas de comportamiento enmarcando una sociedad más moral y llena de valores.