RIESGO SOCIAL

domingo, 23 de agosto de 2015




TEORIAS ETICAS



El ser humano es autónomo para decidir sobre sus actos, pero todos hacemos parte de una sociedad y es prioridad para que haya armonía y convivencia, tener cuidado con nuestros actos y la repercusión que estos tienen en otros.  En la formación de la personalidad  del ser humano  hay factores que influyen como son los familiares,  escolares, sociales   que nos enseña a comportarnos de una manera específica, el ser humano a través de la vida aprende de los demás y de  su entorno.
Dentro de los temas presentados por los diferentes tratadistas sobre ética y moral, podemos ver que el ser humano debe poseer y aplicar aún sobre la libertar que posee el principio de  vivir y dejar vivir a los demás, ya que todo acto siempre tendrá impacto en la vida de otros, en forma positiva o negativo. Por tanto como miembro activo de una sociedad  no puede atentar contra sí mismo y contra otra persona, menos aún contra todo un sistema social establecido.

 Dentro del ámbito laboral existen reglas y  principios que hacen que en desempeño de la profesión muchas decisiones y acciones son o no moral y éticamente aceptadas.
Por ejemplo: El dilema ético y moral sobre el tema de la Eutanasia.

Visto desde otra ética establecida, en  la Antigua Grecia la eutanasia no se planteaba como un problema moral ya que la concepción de la vida era diferente, para este pueblo una mala vida no era digna de ser vivida y por tanto ni el eugenismo, «La eugenesia es la auto-dirección de la evolución humana»  ni la eutanasia complicaban a las personas.

 Cicerón le da significado a la palabra como muerte digna, honesta y gloriosa.

Platón dice: se dejará morir a quienes no sean sanos de cuerpo.

En la Edad Media, bajo la óptica de creencias religiosas cristianas, la práctica de la eutanasia es considerada como pecado.

MUNDO ROMANO: 
  “Felice vel honesta morti mori “
“Morir con una muerte feliz y honesta” Morir con una muerte feliz y honesta”

SENECA (a.C.) será defensor de la eutanasia en sus   famosas cartas:

 “No se debe querer demasiado a la vida “No se debe querer demasiado a la vida  ni odiarla demasiado, sino buscar un término medio no buscar un término medio  y ponerle fin cuando la razón lo aconseja”

Hipócrates representa una notable excepción: él prohíbe a los médicos la eutanasia activa y la ayuda para cometer suicidio.   

JURAMENTO HIPOCRATICO JURAMENTO HIPOCRATICO:
 “Jamás daré   a nadie una medicina mortal   que me lo solicite”

Francis Bacon en 1623, defiende que la muerte de un enfermo ayudado por el médico no constituye un problema religioso ya que es al científico a quien le corresponde determinar cuándo un hombre enfermo debe morir o no.

Tomás Moro 1516, presenta una sociedad en la que los habitantes justifican el suicidio y también la eutanasia activa, sin usar este nombre. A fines del siglo XIX, en América del Sur existía la persona del despenador o despenadora, encargada de hacer morir a los enfermos desahuciados a petición de los parientes.
Este conflicto está determinado por la ética que implica  este dilema y que para determinar la ética de un proceder hay que hablar de moral, justicia, verdad, conocimiento científico y sociedad, ya que es precisamente en la sociedad donde se forman estos valores que, unidos al conocimiento científico, contribuyen a la formación de la ética médica.
En este caso las acciones que se tomen sobre la este tema repercutirá en la evolución política de un sistema de salud que nos atañe a todos.

Para concluir
Puedo decir que el hombre es autónomo al tomar decisiones pero que se vive dentro de una sociedad que se encarga de juzgar todos los actos que se realicen enmarcados dentro de una moral propia adquirida por las experiencias y enseñanza en el desarrollo individual de cada persona , pero que está enmarcada en una ética o reglas de orden  social.